part. activo
Participio de contener. Que contiene.
adj.
Se dice de la persona que posee y practica la virtud de la continencia.
sust. masc.
1) Cosa que contiene en sí a otra.
2) Aire del semblante y actitud y compostura del cuerpo.
3) Geografía. Extensión muy grande de tierra que, aunque rodeada de mar, no puede llamarse isla ni península debido a su gran tamaño. La superficie del planeta que habitamos, se halla formada por parte líquida y parte sólida de muy desigual extensión, por cuanto de los 510 millones de kilómetros cuadrados que comprende la superficie total,365 corresponden a los mares y 145 a las tierras. Esta parte sólida está formada por islas en medio de los mares y por grandes masas de tierra rodeadas por el mar, a las cuales, por su gran extensión y no consideradas como islas, se las llama continentes. Su formación se debe a que incandescente y fluido nuestro globo como nebulosa solar, su movimiento de rotación le dio la forma actual, mientras que pasando por una serie de estados siderales llegó a la fase de planeta, ya dentro de ella, el primer fenómeno que se produjo fue la transformación de su fotosfera en una película sólida o corteza terrestre, que por precipitar la atmósfera sus aguas sobre ella, por enfriamiento, fue aumentando de espesor sujeta a las roturas y plegamientos originados por fuerzas orogénicas que han creado las cadenas de montañas y cuencas donde se reúnen las aguas, o sea, los mares, y los continentes. Se distinguen cinco continentes Europa, Asia (el mayor de todos), Africa América y Oceanía. De acuerdo a la teoría del desplazamiento de las placas continentales, cada continente tiene por base una placa de materias ricas en hierro y níquel (Nife), de mayor densidad y dureza que el estrato inferior, compuesto por sícile y aluminio (Sial). Esta base o placa continental por distintas causas, se desliza lentamente patinando sobre el Sial, por lo cual los continentes han chocado unos con otros, han cambiado sus formas y tamaños, a lo largo de diversas edades geológicas, y aún en la actualidad prosiguen su lento desplazamiento a velocidades que, en algunas partes, alcanzan a los dos centímetros anuales